Cvi.che 105: comer con bulla.
Este post está dedicado a quienes no les importa comer con bulla. Y cuando digo bulla, me refiero a ruido. A alboroto. A gente hablando, brindando, celebrando.
No he tenido la dicha de ir a almorzar en Cvi.che 105. Tampoco he ido un fin de semana, entre otras cosas porque cuando he ido a cenar un miércoles o un jueves, siempre están llenos. Y cuando digo llenos, hablo en serio. Así que no me imagino cómo será aquello un viernes o un sábado.
Pero lejos de ser un problema, que siempre estén a reventar es signo inequívoco de la frescura y calidad de los frutos del mar que allí se comen
Los platos de degustación de ceviches servidos en bandejas que permiten que uno no se mezcla con el otro.
Pero lo mejor viene después. Diría que la cocina de Cvi.che 105 es primero una oda a los colores, y luego una oda a los sabores. Salvo por los postres y los mojitos de maracuyá que me encantan, jamás he comido otra cosa en Cvi.che 105 que no sean ceviches y tiraditos.
Claro que también he comido acompañantes y guarniciones: las papas a la huancaína y una causa peruana que es imposible de resistir porque en lugar de estar preparada con papas amarillas está hecha con camote (batata) aromatizado con ají, limón y miel de naranja, acompañado del mejor ceviche al ají amarillo, y toda esa delicia coronada con un langostino.
A lo que me refiero es a que no he probado otros platos fuertes de la gastronomía peruana, que no sean los frutos del mar que tan buena reputación le han ganado a esos cocineros que hacen obras de arte de cualquier cosa que salga del océano.
Como soy de las que come con los ojos y me gusta degustar y comparar, mi opción favorita es la bandeja con cuatro tipos de ceviche.
Con los ojos cerrados recomiendo el ceviche “orgía de mariscos” ahogado en leche de tigra, el ceviche pucusana marinado en jugo de limón con cebolla, cilantro y ají rocoto; o el anconero con ají limo, o el rojiblanco inspirado en la bandera del Perú, con crema de rocoto y crema virgen; o el ceviche a la crema de pisco.
Los postres merecen un capítulo aparte. Hay que probar la crème brûlée de guanábana, el suspiro limeño, el merengón de chirimoya y la mousse de lúcuma. Si se te hace difícil escoger, entonces pide el trío de sabores peruanos “a la cuchara” que trae suspiro limeño, merengón de chirimoya y mousse de lúcuma.
También recomiendo la mousse de maracuyá (uno de mis postres favoritos) y un postre que no está en el menú pero que es de muerte lenta y agonía prolongada: el cuatro leches de lúcuma.
La mousse de chocolate: sólo basta ver la foto para saber que aquello es una delicia.
Cvi.che 105 debe su nombre a la dirección donde está ubicado: en el 105 del NE en la Tercera avenida en Downtown Miami. Hace poco abrieron un local en South Beach. Tendré que ir a «inspeccionar».
Cvi.che 105
105 NE 3rd Ave. Miami, FL 33132
+1(305) 577-3454
Este post es una versión del que publiqué originalmente en MiamiDiario. Soy una escritora que cocina o una cocinera que escribe: el orden de los factores de no altera el producto. Desde 2010 hice de SAVOIR FAIRE el lugar donde convergen mis dos pasiones y ahora desarrollo recetas profesionalmente y trabajo como estratega y creadora de contenidos digitales, incluyendo la producción de videos de cocina. Disfruta mis recetas.
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